De EQUO nos enamoró la oportunidad de construir una opción política ecologista radicalmente democrática.
En mi caso, vivo en Gipuzkoa y pertenezco a la Asamblea de esta provincia. Desde nuestros inicios, la asamblea siempre ha representado el máximo órgano de debate y toma de decisiones… un buen día se decidió no volver a renovar la Mesa de Coordinación y, desde hace 3 años, funcionamos sin Mesa. Lo decidimos porque nos sentimos a gusto reuniéndonos, deliberando, conociéndonos, aprendiendo, capacitándonos, decidiendo y viendo cómo es posible hacer crecer un proyecto político asambleario. Actualmente vamos a renovar la portavocía y, para evitar la discriminación entre candidatas por bilingüismo, estamos considerando tener una tetra-portavocía (en caso de que las más votadas no sepan euskera, les acompañarán las siguientes personas elegidas que sí sepan).
He dinamizado el censo de EQUO Gipuzkoa durante 3 años. Cuando empecé a hacer esta tarea en 2012 éramos 78 personas censadas y, a día de hoy, somos 260. Todas las personas a las que he llamado para que se unieran a nuestros encuentros, lo han hecho motivadas por esta opción horizontal que les hemos ofrecido. Hemos crecido pero seguimos apostando por nuestra asamblea como herramienta de defensa de las propuestas que ofrecemos a la sociedad desde la ecología política.
Lo importante para nosotras es el liderazgo del proyecto, el protagonismo del grupo, no el de las personas. Simplemente, unas veces son unas las personas que se encargaran de hacer un trabajo (tesorería, comunicación, portavocía, censo, equomunidad…) y otras veces se responsabilizan otras e, independientemente de qué persona haga esto o lo otro, el futuro del proyecto está salvaguardado por la asamblea.
A día de hoy tenemos 7 concejalías de EQUO en Gipuzkoa en diferentes confluencias de todo tipo: Donosti, Eibar, Errenteria, Mutriku, Bergara ,Eskoriatza y Legazpi, mi pueblo. Nadie esperaba semejantes resultados en las pasadas elecciones municipales de 2015, pero ahora todas pensamos que lo hicimos posible gracias a ese trabajo de grupo, gracias al apoyo mutuo y la colaboración. Nuestra filosofía de grupo fue exportada pueblo a pueblo a través de nuestras militantes a las asambleas de las confluencias de sus pueblos y ciudades y, finalmente, éste saber hacer acabó dando frutos. En este momento, Loic Alejandro, María Jesús, Mikel, Iñigo, Aiert, Rafa y Alberto son concejales de EQUO en esta provincia tan particular.
A lo largo y ancho del territorio nacional, es indiscutible el éxito político de nuestro proyecto. EQUO es ahora ese sueño hecho realidad y tenemos la gran oportunidad para cambiar la sociedad desde las instituciones. A nivel federal, más de un 8% de la afiliación es cargo público. Es un porcentaje muy significativo y que nos debería hacer recapacitar, reflexionar internamente. No se ha producido esta situación antes en ningún partido político en nuestro país. Es una enorme satisfacción, pero tiene su lectura perversa: todas esas representantes institucionales tienen ahora cargos que les exigen horas de trabajo, responsabilidad y conocimientos. Hasta ahora, habían dedicado mucho de su tiempo a EQUO, pero ahora es EQUO el que tiene que dedicar tiempo a ellos. Paralelamente, necesitamos urgentemente que otras personas entren a ocupar el vacío que han dejado en la militancia de la organización. De nuevo, nos topamos con la dinamización del censo y su importancia.
Convivo con uno de esos cargos públicos de EQUO y sé lo que implica el trabajo en el Ayuntamiento. La responsabilidad institucional requiere un enorme sacrificio, lo estamos experimentando en nuestras propias carnes, en nuestra propia casa. Es necesario estar al 100% para que no pasen de largo las oportunidades políticas y son muchos los actos, reuniones, comisiones, etc… a las que hay que acudir.
Actualmente, por ejemplo, estamos ya sumergidas en los presupuestos municipales para 2017. Son muchas las horas necesarias de dedicación al cargo en momentos como éste. Lo que vemos es que nos hemos tenido que buscar la vida para lograr entender un mínimo la estructura de los presupuestos municipales, para poder hacer propuestas coherentes y con sentido. Las necesidades de nuestros concejales son desiguales, ya que en algunos casos tienen el respaldo de una asamblea de confluencia detrás y, en otros casos, ya no. Las confluencias fueron muy ilusionantes cuando surgieron, pero en muchos lugares se han ido desinflando y la realidad es que el concejal se queda “solo”. Esto está ocurriendo en algunos casos de mi provincia, por lo que ocurrirá en más lugares también.
El partido debe ponerse a disposición de todas las personas que nos representan para cubrir sus necesidades y para crear una estructura de apoyo que facilite crear sinergias entre los cargos electos. Ni siquiera hemos organizado un encuentro presencial (o virtual) entre concejales y resto de cargos. Un año y medio después, nuestros cargos y sus asesores (las que los tengan) no se conocen entre ellos.
Precisamos crear una estructura, desarrollar un área institucional fuerte, capacitada y capacitadora de apoyo bidireccional CARGO-EQUO, EQUO-CARGO, mediante la cual se produzca un intercambio de contenidos y formación, además de asesoría jurídico-técnica y que logre crear sinergias entre nuestros cargos institucionales, eliminando las duplicidades y favoreciendo el flujo de comunicación y formación entre ellos. La composición de esta área, que nacería de la CEF, considero que podría estar dinamizada por las co-portavoces, ya que son éstas la correa de transmisión más ágil que tenemos en EQUO. También formarían parte de ella las coordinadoras de los grupos de trabajo de la EQUOMUNIDAD (hablaré de ésta nuestra herramienta más extensamente en otra entrada), dos representantes de la Fundación (en paridad) y al menos el responsable del área de comunicación de la CEF.
Esta es simplemente una idea de estructura organizativa que se me ocurre a mí. Organizar estructuras de trabajo requiere su proceso de análisis pertinente y hay personas dentro y fuera de nuestra organización suficientemente capacitadas que nos pueden asesorar en esta labor.